Día Mundial de la Medicina de Urgencias y Emergencias
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26 de mayo de 2025

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas, se une a todos los profesionales del campo sanitario de la Urgencia y Emergencia para celebrar este 27 de mayo “El Día Mundial de la Medicina de Urgencias y Emergencias”. Este día fue promovido por la European Society for Emergency Medicine (EuSEM) para concienciar a la sociedad y a los profesionales sobre la importancia de esta especialidad en la atención médica.
El sindicato CSIF quiere felicitar a todo el colectivo de profesionales sanitarios que trabajan en el campo de la Urgencia y Emergencia, y aprovecha esta fecha para sumarse a sus reivindicaciones que desde hace muchos años vienen reclamando tanto en el plano académico, laboral como profesional.
En estos años se están viviendo profundos cambios en el ámbito sanitario del mundo de la Urgencia y Emergencia que van a condicionar el futuro de esta especialidad.
La aparición del Real Decreto 610/2024, donde “se crea la especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias, con el objetivo de formar a profesionales capacitados para la atención de situaciones críticas”, ha supuesto la culminación de una vieja reivindicación del colectivo médico de este campo que por fin se equipara a las naciones más desarrolladas de nuestro ámbito y con lo que se le otorga el merecido reconocimiento académico. Este proceso, que todavía se debe completar, debe de dar solución a todos los colectivos implicados y pronto se debería materializar, otorgándose los primeros títulos de especialistas, junto con la convocatoria de las primeras promociones de residentes que comenzarán a formarse en el sistema MIR. Esto se va a convertir en un reto para las unidades docentes que van a tener que responder a la gran expectación creada. La Administración tendría que poner los recursos necesarios para que el sistema MIR continúe siendo un referente en la formación de calidad de nuestros futuros especialistas.
El número de atenciones en los distintos servicios de urgencias y emergencias del país sigue en ascenso imparable, sin que se observe un techo en el horizonte cercano. Después de la pandemia del COVID, estas cifras se han disparado sin que se haya dado una solución satisfactoria para controlar esta tendencia. Además de los factores clásicos que lo justifican como son los cambios en la demanda poblacional, aumento de las listas de espera tanto en consultas, pruebas diagnósticas o quirúrgicas y aumento demográfico, hay en la actualidad un nuevo factor determinante como es la falta de profesionales sanitarios, médicos y profesionales de enfermería, que está siendo alarmante en todas las comunidades autónomas. La falta de médicos, tanto en el ámbito de la atención primaria como en la atención especializada, ha supuesto una alteración y gran demora en las consultas, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas, por lo que la población sobrecarga los servicios de Urgencia para buscar una solución a sus problemas de salud. Esta carencia de profesionales también se da en el personal de los servicios de Urgencias, con lo que se multiplican los problemas y la saturación que ya presentaban desde hace años. Aunque esta carencia en la formación de médicos fue anunciada hace años, no se tomaron medidas eficaces por parte de la Administración y en la actualidad, se siguen sin tomar, ya que no se solucionan los principales problemas laborales y las malas condiciones económicas. Esta situación hace que el trabajo en el Sistema Nacional de Salud sea poco atractivo, sobre todo en el ámbito de la medicina de Urgencias y Emergencias en comparación a otros países, lo que hace que nuestros profesionales emigren cada año con más frecuencia.
Pero además de en las condiciones económicas, tampoco ha habido un cambio en las penosas condiciones laborales en las que trabajan los médicos y profesionales de los servicios de Urgencia y Emergencia. Estas condiciones laborales que soportan serían inasumibles para otros colectivos de trabajadores y son difícilmente creíbles por el público general. A modo de ejemplo, jornadas de guardia de 24 h de trabajo continuo que, debido a la saturación de los servicios de urgencias, se ha convertido en un trabajo “a destajo”, ininterrumpido, estresante y sin los medios técnicos ni los recursos necesarios. A esta jornada laboral le sigue una jornada de descanso que hay que devolver, ya que no se considera tiempo trabajado. Estas condiciones inciden gravemente en la salud laboral del trabajador, en la seguridad del paciente y en la humanización de la atención sanitaria, en la que parece que ninguna Administración haya decidido buscar una solución.
La acumulación de problemas no resueltos de los servicios de Urgencia y Emergencias hace que cada vez sean más frecuentes los actos de violencia y agresiones contra el personal de la sanidad. Esta “lacra” del sistema sanitario, que aunque injustificable en todos los casos, corresponde en un tanto por ciento importante a una desesperación de la población porque el sistema sanitario no le soluciona sus problemas de salud. El personal de la sanidad sigue esperando una respuesta contundente por parte de la Administración y de la legislación que les proteja de una forma eficaz y que hoy por hoy no existe.
La iniciativa de reforma del Estatuto marco, que con tanta expectación ha sido vivida por todos los profesionales, ha sido una nueva decepción, ya que no se da solución a estos graves problemas y se está empezando a ver como una gran oportunidad perdida para una reforma en profundidad de las condiciones laborales y profesionales actuales.
Pese a todos estos problemas que sufren, estos grandes profesionales de los servicios de Urgencias y Emergencias son uno de los colectivos más valorados por la población y, gracias a ellos, en cada punto de la geografía de nuestro país tenemos asegurada una continua atención sanitaria urgente y de calidad de la que todos nos tenemos que sentir orgullosos.
Por todo esto, desde el sindicato CSIF exigimos a la Administración la rápida culminación del proceso de obtención del título de especialista en Medicina de Urgencias y Emergencias, la mejora en las condiciones laborales y profesionales de sus trabajadores y la adecuación de las plantillas a las nuevas demandas asistenciales de la población en el ámbito de las Urgencias y Emergencias.
¡Feliz Día de la Medicina de Urgencias y Emergencias!