Para CSIF Educación Madrid, la nueva Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) llega con mucha incertidumbre
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30 de maio de 2025
-La inacción del Ministerio de Educación y la falta de instrucciones hasta última hora solo han generado dudas entre estudiantes y docentes

El próximo martes 3 de junio dará comienzo la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) en la Comunidad de Madrid. Durante cuatro días miles de alumnos se examinarán en busca del acceso a los estudios universitarios.
Para CSIF Educación Madrid, la preparación para la nueva PAU, conocida hasta el año pasado como EVAU (Evaluación para el Acceso a la Universidad), presenta en este año 2025 bastantes dificultades debido a los cambios en la estructura y enfoque de los exámenes.
Sin apenas nuevos modelos de examen, estos cambios se centran en una comprensión más profunda de los conceptos y una mayor capacidad de aplicación, en lugar de la simple memorización.
Sin embargo, la reducción de las alternativas, pues ya no habrá dos opciones de examen entre las que elegir, sino un solo modelo único, con alguna posibilidad de elegir entre diferentes preguntas dentro de ese modelo, en cierta manera simplificará algo el diseño de la prueba, pero obligará al alumno a estudiar todo el temario.
Por el contrario, la prueba tendrá un enfoque más competencial, con preguntas que evalúan la capacidad de razonamiento, análisis y aplicación de conocimientos en situaciones reales, el mayor peso en las preguntas abiertas y semiabiertas, que representarán un mínimo del 70% de la nota en cada examen lo que obligará a un rediseño de la filosofía de los temas/ejercicios propuestos.
De cara a la corrección, la mayor penalización por errores, la coherencia, cohesión, corrección gramatical, léxica y ortográfica, con posibles descuentos en la nota por errores en estas áreas, complicará algo más a los correctores esta parte del proceso.
En resumen, en CSIF Educación Madrid creemos que la nueva PAU 2025 exige una preparación más completa y enfocada en la comprensión y aplicación de los conocimientos, lo que puede representar un desafío tanto para los estudiantes como para los docentes.
Este año, al ser todo tan novedoso, las dudas en el sistema de examen han sido la tónica dominante en todo el proceso. Una vez más, la inacción del Ministerio de Educación y la falta de instrucciones hasta última hora solo han generado incertidumbre causada por la precipitación con la que se aprobó el Real Decreto en junio del año pasado.