Balance de CSIF Bomberos Sevilla tras dos años de gobierno municipal: “la estructura del servicio está absolutamente desmoronada”
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12 de ekaina de 2025
Hay profesionales que ocupan puestos de hasta dos categorías superiores y sin la habilitación legal correspondiente. Los bomberos de Sevilla no cuentan con procedimientos de actuación que definan a qué riesgos pueden quedar expuestos en cada tipo de intervención. No existe aún la Ordenanza Contra Incendios que el Pleno del 28 de mayo de 2024 aprobó redactar. No se realiza un adecuado mantenimiento de equipos técnicos desde hace años: “un bombero no puede quedar incomunicado, es fundamental un mantenimiento exhaustivo de estos equipos, nuestra vida depende de ellos”

Sevilla, 12 de junio de 2025.- La sección sindical de CSIF en el cuerpo de Bomberos de Sevilla ha mantenido una reunión con la Dirección General de Seguridad y con el responsable del área de Bomberos para trasladarle el balance del sindicato relacionado con los primeros dos años de gobierno local. CSIF ha relacionado las reivindicaciones que más preocupan a los bomberos de CSIF del Ayuntamiento de Sevilla, esperando que en los próximos dos años se atiendan:
La primera reivindicación que no se ha logrado es la de la negociación del nuevo calendario laboral, que el Servicio de Bomberos propuso, donde se reflejaba un aumento de mínimos de guardia, para que los tres parques de zona tengan un bombero más. Actualmente, la emergencia más habitual de bomberos, el incendio en vivienda, se atiende con una dotación diferente, dependiendo del barrio en el que se produzca.
El gobierno municipal también ha olvidado por completo la promoción Interna de Bomberos. La estructura del servicio está absolutamente desmoronada, con todas las jefaturas de servicio, departamentos y secciones, vacantes. De los 20 sargentos-jefe de Parque que debería haber como mínimo para cubrir la plantilla operativa del servicio, solo hay 8 operativos. Y la única solución planteada por el equipo de gobierno es que los bomberos asuman esa importante responsabilidad de ocupar puestos de hasta dos categorías superiores, además, sin la habilitación legal correspondiente.
Para que esta promoción interna se pueda realizar, es necesaria una modificación de la plantilla y la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) para adaptar las denominaciones de las categorías profesionales y los grupos de clasificación. Desde 2023, los bomberos andaluces tienen una ley autonómica que exige adaptar sus categorías profesionales, antes de 2027, a una nueva ordenación.
No se ha atendido la petición de CSIF de actualizar nuestro Reglamento de 1976 y de tener unas normas internas de funcionamiento aprobadas y unos procedimientos de actuación, como obliga el recientemente aprobado Decreto 36/2025 de homogeneización de los Servicios de Bomberos de Andalucía. Los bomberos de Sevilla no tenemos Procedimientos de Actuación que indiquen a los mandos y bomberos cómo deben actuar y a qué riesgos pueden estar expuestos en cada tipo de intervención.
A ello que se suma la inexistencia de la Ordenanza Contra Incendios que el Pleno del pasado 28 de mayo de 2024 aprobó redactar, para que los planes de emergencias registrados de edificios e instalaciones singulares y vulnerables de la ciudad se integrarán en el sistema operativo de bomberos.
Seguimos sin un Gobierno municipal que logre un Convenio con el Puerto de Sevilla, como tienen la mayoría de los puertos del Estado con los Servicios de Bomberos cercanos, para atender la responsabilidad compartida de las emergencias que puedan desarrollarse. Es necesario formalizar, en la relación de puestos, las unidades de intervención sobre y bajo lámina de agua: una ciudad con río y puerto fluvial debe tener una unidad especializada de buceo.
La construcción de un nuevo parque de bomberos, para prestar un servicio más rápido en la Dársena y a los barrios de Triana y Los Remedios, o la simple financiación de cursos de formación, para que la unidad de buceo no se hunda por falta de efectivos, sería suficiente.
En cuanto a los medios materiales, instalaciones, vehículos y materiales, hay cuestiones vitales que deben atenderse. Llevamos años sin que se realice un adecuado mantenimiento o se renueven los radioteléfonos portátiles, lo que afecta a nuestra comunicación durante los siniestros. Un bombero no puede quedar incomunicado.
Es fundamental un mantenimiento exhaustivo de estos equipos, y el reemplazo inmediato de las piezas que faltan por avería, como los PPT o las llaves Tally de los bodyguard, ya que nuestra vida depende de ellos.