CSIF rechaza las medidas de control que la empresa ASM Ambulancias ha impuesto a la plantilla en la Axarquía

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28 de enero de 2022

TRANSPORTE SANITARIO

La dirección obliga a los técnicos de emergencias sanitarias a cumplimentar cada dos horas un check-list sobre el estado de los vehículos a la empresa, presionando aún más a unos trabajadores que ya de por sí soportan unos altos niveles de estrés

La sección sindical de CSIF en ASM Ambulancias Málaga manifiesta su rechazo a las medidas de control que ha impuesto la dirección de la empresa a los trabajadores en la Axarquía, que considera desproporcionadas y que en nada benefician la prestación del servicio esencial a los pacientes.

La dirección de ASM ha impuesto un nuevo procedimiento de supervisión que obliga a los técnicos de emergencias sanitarias adscritos a la zona de la Axarquía a cumplimentar cada dos horas un check-list de la carrocería a la empresa para revisar el estado del vehículo. Una medida que ha sido adoptada “debido a los actos vandálicos acontecidos recientemente”, según ha argumentado la empresa en la comunicación remitida a la plantilla.

CSIF, que muestra su total repulsa hacia cualquier tipo de acto vandálico, censura las insinuaciones de la empresa contra los trabajadores, a los que señala y persigue con medidas como esta, que sin duda van a entorpecer y perjudicar el desempeño diario del colectivo.

Estas medidas, lejos de proporcionar seguridad sobre el deteriorado estado de los vehículos -cuya falta de manteamiento ha sido denunciada por este sindicato desde hace años- solo persiguen controlar la actividad diaria de la plantilla, precisamente en un momento como el actual, en plena convocatoria de huelga indefinida por la mejora de las condiciones laborales en el servicio.

Además, CSIF advierte de que la empresa está presionando aún más a unos trabajadores que ya de por sí soportan unos altos niveles de estrés, propios de un servicio de emergencias sanitarias como este, que, ahora, además, se sentirán perseguidos y vigilados.  

La medida, que fue comunicada este jueves por la empresa a la plantilla, ha generado malestar entre los técnicos de emergencias sanitarias, que se ven obligados a asumir funciones de vigilancia y seguridad sobre los vehículos ante la posibilidad de ser sancionados.

Esta central sindical advierte de que no se puede responsabilizar a los trabajadores del estado de las ambulancias, especialmente ante el deterioro que presentan muchos vehículos, y denuncia la posición vulnerable en la que sitúa a la plantilla en la Axarquía, la única zona en la que se han aplicado estas instrucciones en la provincia.

CSIF ha dado traslado a su departamento jurídico de la situación al considerar que se trata de una medida de control desproporcionada y que interfiere en el desempeño diario de los trabajadores. Además, podría suponer una persecución laboral ante la huelga indefinida convocada en la empresa esta semana.

 

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