CSIF denuncia graves vulneraciones de derechos laborales y sindicales en el centro penitenciario Antoni Asunción Hernández de Picassent

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado ante Inspección de Trabajo de Valencia la preocupante situación que atraviesa el personal de seguridad privada en el centro penitenciario Antoni Asunción Hernández de Picassent. Entre las irregularidades detectadas, se señala especialmente la vulneración de derechos fundamentales como la libertad sindical, así como unas condiciones laborales que distan mucho de ser adecuadas para un entorno tan exigente y sensible como el penitenciario.

Desde CSIF se alerta de que el actual sistema de comunicaciones entre puestos presenta serias deficiencias, comprometiendo tanto la seguridad del centro como la integridad de los trabajadores. Además, la falta de medios ergonómicos y adecuados para los operadores de cámaras supone una sobrecarga física y mental, lo que afecta negativamente al desempeño de sus funciones.

Otro de los puntos críticos es la imposición, por parte de la empresa, del uso de aplicaciones de terceros instaladas en los teléfonos móviles privados de los trabajadores para acceder a documentación personal como nóminas, vulnerando así su privacidad y derechos digitales.

La situación se agrava con las prácticas reiteradas de los mandos intermedios de la empresa COVIAR en Castellón, quienes continúan presionando a la plantilla con constantes modificaciones de cuadrantes y horarios, lo que afecta directamente a la conciliación laboral y familiar de los trabajadores. Estas acciones se están llevando a cabo sin ninguna asunción de responsabilidades por parte de la dirección de la empresa

Desde CSIF se denuncia además que, pese al creciente malestar entre la plantilla, ningún representante con capacidad de decisión por parte de la empresa ha establecido contacto directo ni con los trabajadores ni con los representantes sindicales. Esta falta de diálogo y de voluntad de resolución está generando un clima laboral insoportable, en el que la respuesta a las demandas legítimas de los empleados ha sido, en muchos casos, la imposición de sanciones y despidos arbitrarios.

CSIF quiere dejar claro que continuará defendiendo la legalidad y los derechos de los trabajadores, rechazando de forma contundente el trato de indiferencia y desprecio hacia una plantilla que presta un servicio esencial en condiciones especialmente delicadas. La organización sindical exige una intervención inmediata para poner fin a esta situación de abandono institucional y exige responsabilidades a la empresa gestora del servicio.