Los inspectores de Pesca van a la huelga porque el Gobierno quiere imponer jornadas de 24 horas

27 de marzo de 2023

-Son una treintena en Galicia, dieciséis y un jefe de servicio en la provincia de Pontevedra y catorce y un jefe de servicio en la de A Coruña
-El Gobierno modifica las condiciones de trabajo para cumplir las exigencias de la UE sin incentivos económicos para la plantilla: Los trabajadores pararán el martes, 28 de marzo, y se concentrarán en Madrid delante de los Ministerios de Agricultura y de Política Territorial

Los inspectores de Pesca -encargados de controlar que las actividades pesqueras en mar y puerto se realizan de modo reglamentario y evitar, por ejemplo, la captura de especies prohibidas- celebran una jornada de huelga general en todos los puertos pesqueros el martes, 28 de marzo, en protesta por la intención del Gobierno de imponer cambios en sus condiciones laborales, que implican disponibilidad de 24 horas diarias.

 

En concreto, la plantilla -compuesta por 167 inspectores- exigen un complemento salarial específico a cambio de tener disponibilidad absoluta, mientras que el Ejecutivo se ha limitado a ofrecer un complemento de productividad sin que haya puesto sobre la mesa una propuesta económica concreta.

 

El paro -convocado por CSIF, CCOO, ELA y CIG- se completará con dos concentraciones en Madrid delante de los Ministerios de Agricultura y de Política Territorial a las 11.30 horas y a las 13.00 horas, respectivamente, ya que los inspectores de Pesca dependen de ambos Ministerios, según ejerzan su labor en las costas o en Madrid desarrollando labores administrativas.

 

Los horarios de la Inspección de Pesca se regulan por una instrucción del año 2010 que establecía una jornada máxima de 12 horas al día y con programación semanal y mensual, entre otros parámetros. Este colectivo profesional denuncia que la Administración es consciente de que dicho horario no cubre las necesidades de inspección de las flotas pesqueras a pesar de los esfuerzos extra realizados por la plantilla estos años. En este sentido, hace año y medio comenzó una ronda de negociación con los sindicatos pero, ante la falta de acuerdo, quiere imponer nuevas condiciones laborales sin comprometerse a compensarlas adecuadamente.

 

La Inspección de Pesca defiende que sus responsabilidades incluyen supervisión, vigilancia y seguimiento de las flotas pesqueras y de sus capturas para velar que cumplen con la normativa europea. Por todo ello, recuerdan que dichas flotas no faenan sujetas a horarios prefijados, como ocurre con el caso de los inspectores, por lo que si la Administración necesita absoluta disponibilidad de este colectivo para que realice su trabajo en cualquier momento, esta circunstancia ser adecuadamente retribuida.

 

Riesgo de sanciones desde la UE

 

Los inspectores de Pesca recuerdan además que la Comisión Europea vela por el cumplimiento de directivas y reglamentos sobre la pesca comunitaria sobre cantidades de capturas, tipos de pescado, tamaño mínimo, etc. En este sentido, alertan de que puede producirse una pérdida de eficacia si no se realizan todas las actuaciones de inspección y la Comisión Europea detecta que en España decae el número de sanciones e infracciones cometidas. Las consecuencias serían la imposición de sanciones para España o la retirada de ayudas y de financiación para el sector.

 

Los inspectores de Pesca denuncian además que el complemento de productividad que reciben anualmente ha disminuido un 70 por ciento desde 2010 debido a que la partida económica global no ha variado, pero el número de inspectores de Pesca se ha incrementado de forma periódica.

 

Más formación en seguridad marítima

 

Además, emplazan a la Administración a impulsar las reformas necesarias para facilitar el desarrollo de la carrera profesional, a promover mayor formación para actualizar los conocimientos sobre procedimientos, protocolos y legislación comunitaria en pesca. También exigen un mayor compromiso por parte del Gobierno en formación y prevención de riesgos laborales.

 

En este sentido, denuncian que son el único colectivo civil que trabaja en el mar sin realizar el curso homologado de formación de seguridad marítima, con una duración de 70 horas. Este curso, que debe realizar cualquier marinero o persona que trabaja en el mar, instruye sobre cómo actuar en caso de incendio, cómo acceder a los botes de rescate, protocolos de abandono del buque, etc.

 

En su caso, los inspectores de Pesca -que pueden permanecer embarcados hasta un mes- realizan una formación básica de 15 horas, cuando en 2010 se realizaba un curso específico de una semana de duración en un centro de formación especializado.

 

 

COMPARTIR