CESI insta a la UE a actuar para abordar los desequilibrios de la fuga de cerebros en Europa

En el documento de posición, que se desarrolló como respuesta a una consulta reciente de la Comisión Europea sobre 'Fuga de cerebros: mitigar los desafíos asociados con la disminución de la población', CESI:

• apoya el principio del mercado único de la UE de libre circulación de trabajadores, bienes, servicios y capitales y señala que la emigración por fuga de cerebros puede ayudar a cubrir la escasez de habilidades en el mercado laboral de los Estados miembros con las condiciones de trabajo y la cobertura de protección social más ventajosas, pero está profundamente preocupados por los efectos a largo plazo de tales flujos migratorios de trabajadores hacia los países de origen. Estos enfrentan el despoblamiento de vastas regiones que quedan desatendidas y desfavorecidas por falta de profesionales, en detrimento de la población y de las perspectivas económicas del país en general. Pierden financieramente cuando educan a su fuerza laboral en los sistemas de educación pública, solo para verlos mudarse luego para trabajar en otro lugar. Tales desarrollos, con el tiempo, amplían las disparidades financieras, los niveles de vida y el desempeño económico entre países y regiones más y menos favorecidos. En un mercado único de la UE con libre circulación de mano de obra, la UE tiene un papel importante para establecer el marco para una migración laboral ética, sostenible y justa en Europa y ayudar a equilibrar los factores de empuje y atracción de la migración laboral y abordar su complejidad y diversidad. consecuencias socioeconómicas.

 

• señala que en los próximos 10 años se estima que en 1 de cada 5 Estados miembros de la UE se jubilará el 25 % de la mano de obra actual y que la población en edad de trabajar se reducirá en un 4 %. Esto ejerce presión sobre la sostenibilidad de los sistemas de protección social. El desafío de la fuga de cerebros no se trata solo de equilibrar los factores de tira y afloja entre los países de Europa, sino también de un enfoque estratégico e integrado para abordar las consecuencias de la reducción general de la fuerza laboral en Europa. La iniciativa de fuga de cerebros de la UE debería ser sensible a esto.

 

• reconoce que la reducción de la mano de obra significa que la disponibilidad de mano de obra es cada vez más escasa, lo que a su vez aumenta la competencia por los trabajadores entre regiones y países. En teoría, esta competencia debería conducir a mejores condiciones de trabajo. Sin embargo, la experiencia ha demostrado que puede ocurrir lo contrario: el deseo de los profesionales de regiones y países desfavorecidos de trasladarse a regiones y países más ricos suele ser tan fuerte que muchos aceptan condiciones de trabajo peores que las del estándar de esa región o país (incluso si son aún mejores). que los estándares en la región o país de origen). La iniciativa de fuga de cerebros de la UE también debería ser sensible a esto.

 

• señala que la fuga de cerebros es especialmente crítica en el ámbito de los servicios esenciales, que a menudo son servicios públicos. La pandemia de Covid-19 puso de relieve hasta qué punto el acceso a los servicios públicos esenciales, como la salud y la atención, es clave para una sociedad y una economía fuertes, resilientes y saludables, especialmente en tiempos de crisis. Los servicios esenciales siempre deben estar fácilmente disponibles, tener un alcance suficiente y una calidad adecuada para todos los ciudadanos de la UE. Durante la pandemia de Covid-19, este no fue el caso. Para servicios esenciales accesibles, disponibles y de alta calidad, las inversiones adecuadas deben dirigirse tanto a instalaciones e infraestructura como a equipamiento y, sobre todo, a recursos humanos. Muchos servicios públicos esenciales carecen de personal, mientras que las condiciones de trabajo son precarias y la remuneración del personal suele ser inadecuada. Mientras persistan estas deficiencias, no se podrán prestar servicios de calidad. Así lo confirma un estudio reciente encargado por el Parlamento Europeo sobre 'Revalorización de las condiciones de trabajo y salarios de los trabajadores esenciales'. A la luz de posibles crisis futuras, que seguramente ocurrirán, la iniciativa de fuga de cerebros de la UE debería hacer hincapié en abordar los problemas de fuga de cerebros en los servicios públicos esenciales.

El secretario general de CESI, Klaus Heeger, ha manifestado al respecto que: “Implementar la iniciativa de fuga de cerebros de la UE requerirá, sobre todo, que la política de cohesión de la UE y los fondos estructurales y de inversión de la UE se adapten aún más para mitigar las causas y consecuencias de la fuga de cerebros, que el marco de gobernanza económica de la UE sea sensible permitir las inversiones necesarias por parte de los Estados miembros para abordar estructuralmente la fuga de cerebros, y que la fuga de cerebros se aborde sistemáticamente en el proceso del Semestre Europeo y sus informes por país y recomendaciones específicas por país”.

La posición completa de CESI está disponible aquí.

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