El incendio de Villanueva de Viver, en el interior de Castellón, que ya ha quemado más de 4.000 hectáreas de monte, “debe servir de aviso serio” para la Junta de Castilla y León, ante la casi primera ola de calor de este año en España, que se ha adelantado al mes de marzo. Así lo advierte CSIF, que insiste y urge a la Junta la implantación inmediata de un operativo anti-incendios “con los medios humanos y materiales suficientes para poder atajar cualquier conato en toda la Comunidad”.