La Junta de Personal del Área Sanitaria de A Coruña-Cee solicita amparo a la Valedora do Pobo ante la inacción de la Consellería de Sanidade frente a las agresiones a profesionales
- Prensa y Comunicación
9 de May de 2025
-Las representantes de la Junta de Personal fueron recibidas por Nuria Palmero, asesora de la Valedora, quien se comprometió a tramitar la queja con la mayor urgencia posible ante la gravedad de la situación y el derecho de los profesionales a trabajar en un entorno seguro
-“Nos sentimos impotentes, la Valedora es nuestro ultimo recurso. Necesitamos y exigimos prevención”, afirmó Maite Macías, en representación de CSIF

Santiago de Compostela, 9 de mayo de 2025.- La Junta de Personal del Área Sanitaria de A Coruña-Cee se ha dirigido formalmente a la Valedora do Pobo para solicitar su amparo ante la falta de respuesta por parte de la Gerencia del área y de la Consellería de Sanidade frente al incremento de las agresiones a profesionales. La representación de los trabajadores denuncia una situación de inseguridad prolongada que, según indican, podría evitarse con medidas preventivas adecuadas.
Tras registrar el escrito, las representantes de la Junta de Personal fueron recibidas por Nuria Palmero, asesora de la Valedora do Pobo, quien se comprometió a tramitar la queja con la mayor urgencia posible, reconociendo la gravedad de la situación y el derecho de los trabajadores y trabajadoras a desempeñar su labor en un entorno seguro.
El detonante de esta petición fue la agresión muy grave sufrida por un enfermero en las urgencias del Hospital Universitario de A Coruña (CHUAC) el pasado 3 de febrero, que requirió hospitalización. La Junta de Personal considera que esta agresión, como otras anteriores, podría haberse evitado si durante los últimos años se hubiesen atendido sus reiteradas advertencias y propuestas.
Desde hace años, la representación de los trabajadores viene denunciando un incremento de la conflictividad en las consultas, urgencias y atención primaria, motivado en muchos casos por cuestiones estructurales como las largas listas de espera o la saturación de los servicios. La situación es especialmente preocupante en la atención a pacientes de salud mental, que llegan a permanecer días en urgencias a la espera de una cama en la unidad de psiquiatría, sin que hasta la fecha se haya iniciado la prometida ampliación de dicha unidad.
La Junta de Personal también lleva tiempo advirtiendo de la inseguridad en la atención sanitaria a los reclusos de la prisión de Teixeiro, que se realiza sin protocolos definidos y sin apoyo policial, especialmente en el centro de salud de Curtis-Teixeiro. Denuncia que también trasladaron en su momento a la Valedora.
Protocolos desactualizados
Desde la agresión del 3 de febrero, los delegados de prevención y la propia Junta de Personal han solicitado la convocatoria de diversas reuniones del Comité de Seguridad y Salud, sin que la Gerencia haya aportado medidas concretas. Entre las deficiencias señaladas está la ineficacia del actual sistema de “botón del pánico”, limitado al uso en ordenadores, lo que lo hace inútil en contextos como las urgencias, donde la asistencia es mayoritariamente a pie de cama.
Los protocolos vigentes, según indican, están desactualizados —datan de 2012 y no se adaptan a la nueva ubicación del servicio de urgencias del CHUAC—. Algunas medidas anunciadas por la Gerencia no se han materializado y otras ya existían, por lo que la única acción nueva efectiva fue el refuerzo con un vigilante de seguridad más en el turno de tarde de urgencias.
La situación ya ha sido trasladada a la Inspección de Trabajo, que ha exigido a la Gerencia la revisión del protocolo por ser inespecífico y obsoleto. Además, la Junta de Personal ha solicitado sin éxito una reunión para abordar cuestiones como el escrito de los profesionales de urgencias (con fecha 17 de febrero), la entrega íntegra del informe de causa-raíz de la agresión, el cumplimiento de los protocolos en la prisión de Teixeiro, y la implantación de medidas preventivas en toda el área sanitaria.
El pasado 11 de abril, la Junta de Personal entregó al conselleiro de Sanidade un escrito acompañado de más de 2.000 firmas de trabajadores/as del área, reclamando protocolos actualizados, formación específica y medidas preventivas reales frente a las agresiones, sin que hasta el momento hayan recibido respuesta.
Impotencia
Maite Macías, vicepresidenta de CSIF Sanidade, declaró que “nos sentimos impotentes; la Valedora do Pobo es nuestro último recurso porque ya hemos agotado todas las vías posibles dentro del sistema sanitario gallego”. Macías reclamó “medidas preventivas reales, un cronograma claro de aplicación y, sobre todo, que se cumpla lo que se anuncia. No queremos más promesas incumplidas, sino garantías de seguridad para los profesionales”.
Por todo ello, la Junta de Personal solicita a la Valedora do Pobo que interceda ante la Consellería de Sanidade y la Gerencia del Área Sanitaria de A Coruña-Cee para que se implementen, de forma urgente, las medidas necesarias que garanticen la seguridad de los/as profesionales sanitarios en su lugar de trabajo.