CSIF exige medidas de seguridad urgentes tras un nuevo caso de agresión a tres funcionarios de la cárcel de Huelva
- Prensa y Comunicación
19 de de setembre de 2025

Uno de los trabajadores agredidos ha necesitado atención hospitalaria
La sección sindical del Centro Penitenciario de Huelva de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las Mesas de Negociación de Instituciones Penitenciarias (IIPP) y de Función Pública, exige medidas urgentes para mejorar la seguridad de los empleados públicos de la cárcel de Huelva después de nuevo caso de agresión en la prisión onubense.
Tres funcionarios han recibido asistencia médica en la enfermería del centro y uno de ellos ha necesitado posteriormente atención hospitalaria. Los hechos se han originado durante el reparto del desayuno en el comedor de uno de los módulos conflictivos del centro. Un interno se ha empleado con agresividad cuando los empleados públicos trataban de reducirlo al proferir insultos y alterar el orden ante el resto de presos. El reo ni siquiera se ha calmado en la zona de seguridad del departamento. Más aún se ha dirigido a los funcionarios con expresiones como “sé dónde vivís; con una simple llamada dos amigos os abren la cabeza” y “malditos hijos de puta, os voy a matar a vosotros y a vuestras familias ‘.
La agresión física y verbal ha continuado después del traslado al Departamento de Aislamiento, hasta que consiguieron reducirlo.
“En primer lugar, deseamos la pronta recuperación de estos trabajadores. Y en segundo y de forma enérgica alertamos de que no se trata de un caso aislado. Estas situaciones conflictivas, tal y como venimos denunciando reiteradamente desde CSIF, son cada vez más frecuentes y fruto de diversos factores que confluyen en nuestro centro”, indican fuentes de la sección sindical.
La población reclusa supera los 1.300 internos, una cifra que sitúa la ocupación por encima del 129% de la capacidad de la prisión. Además, el perfil habitual de los internos que ingresan procedente de otros centros es el de personas con un amplio historial delictivo y una clara inadaptación al medio. A esto se añade la mala e ineficaz clasificación de los internos. Una parte importante de la población reclusa soporta en unidades de respeto la convivencia con reclusos que incumplen las normas establecidas. “Priman las estadísticas maquilladas sobre la efectividad del tratamiento penitenciario”, destaca CSIF.
El centro penitenciario de Huelva fue en 2024 el tercero en España en número de agresiones a pesar de la implicación de los funcionarios, quienes temen consecuencias aún más negativas de esta normalización de las agresiones. De hecho, durante el periodo estival la escasez de personal provocó una sobrecarga de trabajo y una merma importante en la seguridad del centro. Unidades con casi 200 internos fueron gestionadas por dos efectivos de vigilancia, ya que la Dirección no consideró necesario reforzar la seguridad.
Desde CSIF demandamos la ampliación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) para adaptarla a las actuales condiciones de trabajo. “Disponemos de menos efectivos que otros centros de las mismas características arquitectónicas y estructurales”, denuncia el sindicato, que reclama la consideración de agentes de la autoridad para los funcionarios de prisiones. “Nos dotaría de unas mayores garantías en nuestro trabajo, así como equipos de reducción efectivos y actualizados como las pistolas Taser, para evitar las continuas agresiones en nuestras intervenciones con una parte de la población penitenciaria cada vez más hostil y menos adaptada a las normas de convivencia tan necesarias en un centro penitenciario”, en palabras de unos de los funcionarios a los que apoya CSIF.