Concentración para reclamar condiciones dignas para el personal público de atención a la dependencia

Trabajadores y trabajadoras de la Fundació d’Atenció i Suport a la Dependència se han concentrado este miércoles, 28 de mayo, ante la sede de la Conselleria de Famílies i Afers Socials en Palma, y la delegación de la Conselleria en Ibiza para reclamar retribuciones dignas y equiparación salarial para los más de 800 profesionales que atienden diariamente personas con dependencia, con discapacidad o problemas de salud mental en Baleares.   

Los sueldos son tan bajos que están provocando la huida de profesionales a otros servicios, como el IMAS, donde las retribuciones son más justas. Durante el año 2024, renunciaron voluntariamente 210 profesionales, una media de 17 bajas al mes. Y este año, el éxodo se ha intensificado y se registran 19 bajas cada mes.

Esta huida de profesionales provoca sobrecarga asistencial, desmotivación y un deterioro en la calidad de atención a las personas usuarias por falta de personal.  En el transcurso de la concentración, la presidenta del Comité Intercentros de la Fundación, Marina  Martínez (CSIF), ha advertido que “la atención de personas dependientes no se puede sostener sólo con la voluntad y la vocación de los trabajadores, ni sobre la 
precariedad acumulada durante todos estos años. Esto es insostenible”. La representante sindical ha alertado del riesgo que supone la elevada interinidad y rotación de personal en un servicio que debe atender personas con graves dificultades y, también, sus familias: “Cuidamos personas mayores, personas con discapacidad física, mental, o ambas. Acompañamos vidas marcadas por el drama familiar, organizamos el día a día de personas tuteladas. Atendemos a los usuarios, pero también sus familias y cuidadores que sufren con ellos. Y lo hacemos cada día con compromiso, con profesionalidad y con cariño. Pero también con sueldos desiguales, con carga asistencial creciente, con desmotivación y con  un goteo constante de compañeros y compañeras que se van a trabajar a otros servicios mejor pagados”.   

La Fundació d’Atenció i Suport a la Dependència gestiona, entre otros centros, las Residencies de Son Llebres, Son Tugores y Son Güells en Mallorca; Sa Serra, Can Raspalls y Can Blai en Ibiza. La protesta llega después de más de dos años de negociaciones. El año 2023 se firmó un acuerdo en el TAMIB para iniciar la equiparación, pero la Dirección General de Función Pública ha bloqueado la aplicación progresiva en tres años que se había acordado.  
Nuevamente la burocracia bloquea la solución a un problema enquistado mientras se degrada un servicio público fundamental por la falta de personal.  CSIF exige un calendario de equiparación salarial real, sin promesas vacías. Es imprescindible mejorar las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras para poder garantizar la calidad del servicios que se merecen los usuarios y las usuarias de las residencias y centros de día de la Fundación. Cada día que pasa sin solución es un día más de precariedad, de desigualdad y de desgaste que no puede tolerarse más.