Otra más y no sé cuántas van

 

Como venimos denunciando desde hace mucho tiempo, cada partido que accede al poder y “gobierna”, introduce su propia ley educativa para mayor gloria de la Educación en España.

La falta de una ley consensuada por todos los partidos políticos ha producido una sucesión de leyes y reformas que no arreglan los grandes problemas que venimos sufriendo desde hace décadas, más bien al contrario. Pues provocan con ello el hartazgo de la comunidad educativa (LODE, LOMCE, LOE, LOMLOE…). A todo esto, le añadimos su implantación (van entrando en vigor primero los cursos impares y después los cursos pares) y obtenemos un batiburrillo de leyes insoportable.

Quizás sea clamar en el desierto, pero CSIF sigue gritando por una ley educativa estable y duradera, consensuada entre todos los actores de la Educación, y no impuesta por los “políticos de turno”.

CSIF quiere recalcar que el desarrollo de esta última ley educativa, mediante los currículos tanto de secundaria como de primaria, se ha visto retrasado por distintas cuestiones y no han visto la luz hasta mediados de agosto. Sí, han leído bien, a mediados de agosto, hasta entonces los “políticos” no han tenido tiempo de finalizar “su proyecto”. Y ahora llega el inicio de curso y claro, toca empezar otra vez con la mitad de los grupos bajo una ley totalmente nueva, con una metodología diferente, con una evaluación totalmente distinta, con un uso de las nuevas tecnologías más profundo y, presente en el día a día, etc… Y claro, por “arte de magia” los docentes han de variar su práctica de la noche a la mañana para que esta nueva ley llegue a buen puerto. ¿Pero de verdad que no se han dado cuenta que no han formado al profesorado? CSIF quiere resaltar la importancia del profesorado en el éxito todas las leyes educativas. Si no se involucra al profesorado, no es posible un cambio tan radical como el que se propone. Se seguirán dando los contenidos de la misma forma que se hacía hace cuarenta años. Para que una ley educativa no fracase hay que contar con el profesorado desde el principio, hay que someter a crítica los proyectos, formar con tiempo al profesorado para que este crea en esa ley y pueda desarrollar su trabajo sin improvisaciones y de forma eficiente. 

Una vez más vamos a empezar el curso con prisas, a la carrera, ya que son mayoría los compañeros que no tienen claro cómo funciona la nueva ley, la forma de impartir clases o el nuevo sistema de evaluación.

Parece que los “políticos” están convencidos de que unan vez publicado en BOE, los docentes, “sin más”, les han entendido y están en disposición de actuar conforme a la nueva ley. Tenemos una sensación de desamparo importante. No puede ser que nos suelten la ley y los docentes “nos tengamos que buscar la vida” para hacerla cumplir y cumplirla de forma eficiente.

Es nuestra futura sociedad la que ponemos en riesgo con tanta ley educativa y lo estamos haciendo de una manera improvisada. Los docentes somos profesionales, queremos ser útiles y para ello demandamos la formación adecuada.  Se tenía que haber retrasado el inicio de curso lo mínimo necesario hasta que el profesorado estuviera formado, ¿tan difícil es realizar la formación en los centros desde el día 1 de septiembre? Demandamos a la Dirección Provincial  previsión.

CSIF solicita cursos de formación relativos a la LOMLOE con urgencia en horario lectivo para poder desarrollar la labor docente con plenas garantías y así garantizar la calidad educativa. Los docentes melillenses nos merecemos que cese la improvisación habitual y que  haya una planificación. La indignación con este tema es grande entre los docentes y sus voces merecen ser escuchadas y que se solventen sus problemas.