CSIF denuncia un nuevo atentado contra la libertad sindical por parte del Gobierno de La Rioja

LOGROÑO, miércoles 12 de enero de 2022

 

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, denuncia que el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Celso González, expulsó con malas maneras al delegado de este sindicato de la reunión que mantuvo este pasado martes con los representantes sindicales de la empresa Transporte Sanitario de La Rioja UTE (Ferrovial) para presentarles al gerente de la empresa pública que les subrogará a partir del próximo 1 de abril. Un suceso que este sindicato considera un atentado contra la libertad sindical por parte de un miembro destacado del Gobierno de La Rioja.

 

Lo ocurrido ayer no es un hecho aislado sino uno más de los que se han producido en similares circunstancias a lo largo de la presente legislatura. A otros miembros de este sindicato se les ha pretendido apartar de sus labores sindicales entre las que se encuentran el conocer y deliberar sobre asuntos que les conciernen y afectan directamente a los trabajadores que representan.

 

En esta ocasión, el delegado de CSIF había acudido a esta reunión en su calidad de miembro del comité de empresa, cumpliendo con su obligación de asistir a un acto donde se iban a tratar asuntos tan decisivos para el futuro de los trabajadores de las ambulancias de La Rioja, y por los que este sindicato lleva trabajando durante años frente a todas las administraciones y gobiernos de turno.

 

Por su parte, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas aseguraba que sólo había invitado al presidente del comité, al mismo tiempo que le decía al representante de CSIF que “se fuese por dónde había llegado” (sic). Pero en esa reunión también estaban delegados de los otros dos sindicatos que forman parte de dicho comité. Es decir, CSIF fue el único sindicato del comité que se quedó fuera.

 

CSIF se teme otro “chanchullo” del Ejecutivo regional para colocar a sus afines en un nuevo contubernio, sin transparencia alguna y sin testigos molestos.

 

Al parecer, el delegado de CSIF es persona non grata para el consejero y para algunos representantes sindicales, desde que este sindicato convocase elecciones sindicales en una empresa que será subrogada el próximo 1 de abril por una empresa pública diseñada ad hoc por el propio consejero.

 

Resulta evidente que el sindicato con mayor representación en el conjunto de las administraciones públicas, tanto a nivel nacional como en esta comunidad autónoma, resulta tan molesto como su delegado.

 

Algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta las innumerables críticas y denuncias por parte de CSIF ante otras componendas como han sido las integraciones; la más reciente, la de la Fundación Hospital de Calahorra que se perpetrará con total desprecio a los principios de acceso a la función pública que establece la ley, como ha denunciado en reiteradas ocasiones este sindicato.

 

Sin duda, el actual Ejecutivo regional está por la labor de colocar a sus afines y dejarlos en una posición de ventaja “in saecula saeculorum”, salpimentando todas las administraciones públicas con nombres de su agrado.    

 

Para CSIF, la actitud del señor González y del Gobierno de La Rioja es un absoluto ultraje a los derechos de los empleados públicos, y del resto de trabajadores que ofrecen servicios públicos, así como un insulto y falta de transparencia ante la opinión pública.

 

La única explicación lógica para la lamentable forma de actuar del consejero podría estar en el nerviosismo que genera la enorme inestabilidad de un gobierno con constantes cambios y de cuya formación original tan sólo quedan tres miembros, entre los que se encuentra Celso González, por el momento.

 

Llegados a este punto, cabría preguntarse cuándo se equivoca la señora Andreu: ¿cuándo nombra a un miembro de su gabinete o cuándo lo destituye?

 

El Ejecutivo regional sigue aplicando la ley del rodillo que le permite obrar a sus anchas con la exigua mayoría parlamentaria de una sola diputada que también sabe imponer su decisivo voto para ir colocando sus peones en el tablero de ajedrez en el que se están convirtiendo la administración y los servicios públicos riojanos.

 

La referida expulsión del delegado de CSIF en la UTE del transporte sanitario es, sin lugar a dudas, un atentado a la libertad sindical que consagra la Constitución Española. Por lo que este sindicato no dudará en llevar a los tribunales de justicia dicha transgresión.