Debido a la dejadez del grupo de gobierno local y la mala gestión de la organización de la Policía, se han visto obligados para salvaguardar su integridad física, denunciar a inspección de trabajo el lamentable estado que llevan solicitando por escrito desde mayo del año pasado.El Ayuntamiento se aventuró a fabricar de forma casera y por medio de los trabajadores municipales, una caja de zona fría, lo que sería una pared antibalas donde se maneja el arma reglamentaria por parte de los agentes policiales a la entrada y salida del servicio. Es tal la desfachatez y vulneración de cualquier norma de seguridad que no pensaron ni en los daños que podría ocasionar cualquier manipulación de dicho artefacto, importándoles lo mas mínimo la seguridad de los agentes.

http://www.eldigitaldecanarias.net/noticia110377.php