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La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas, se ha dirigido a la Seguridad Social para que reconozca de nuevo el derecho a la incapacidad laboral transitoria a las mujeres embarazadas por los riesgos asociados por la exposición al Covid-19.
Este derecho se incluyó en el primer estado de alarma. Sin embargo, CSIF ha tenido conocimiento, a partir de quejas de trabajadoras, de que solo se considera riesgo en el embarazo a partir de la semana 24 de gestación, a pesar de que las embarazadas se reconocen entre los principales grupos vulnerables por parte del Ministerio de Sanidad.
En este sentido, pedimos que se declare el riesgo en el embarazo a las trabajadoras desde el inicio de la gestación para que o bien se le reconozca la baja laboral sin pérdida retributiva o bien se adapte su puesto.
Con el fin de garantizar la máxima protección tanto a la gestante como al feto, desde CSIF reclamamos que las mujeres embarazadas pasen a situación de incapacidad laboral transitoria y se considere, a todos los efectos, incapacidad por contingencia profesional.
Según precisa el “Documento de Información Científica-Técnica Enfermedad por coronavirus, COVID-19” del Ministerio de Sanidad actualizado a fecha 12 de noviembre 2020:
- “Las mujeres embarazadas tuvieron 3 veces más riesgo de ingresar en UCI que las no embarazadas (IC95% 2,6-3,4) y 1, 7 veces mayor riesgo de morir (IC95% 1,2-2,4)”.
- “Se observó en mujeres embarazadas con COVID-19 una probabilidad 3 veces mayor de parto pretérmino y 2 veces mayor de cesárea que las embarazadas no COVID-19 (291)”.
- “En conclusión, actualmente se considera que el embarazo es una situación de mayor riesgo de complicaciones del curso clínico de COVID-19, y también constituye un mayor riesgo para el propio curso del embarazo. Si bien la prematuridad es más frecuente, el curso clínico del COVID en neonatos tiene un pronóstico bueno.