CSIF exige el refuerzo inmediato de la seguridad en los centros de salud tras una nueva agresión en el PAC de Boiro
- Prensa y Comunicación
9 de de juliol de 2025

Santiago, 9 de julio de 2025.- La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) reclama a la Administración sanitaria un plan urgente para reforzar el personal de seguridad en los centros de salud, especialmente en épocas de mayor conflictividad, después del violento episodio registrado ayer en el Punto de Atención Continuada (PAC) de Boiro, coincidiendo con las fiestas de la localidad.
A media tarde, un individuo en estado de embriaguez y bajo los efectos de las drogas acudió al PAC alegando que se encontraba mal. Poco después llegaron su mujer y su suegra, que intentaron convencerlo para que abandonara el centro. Tras una discusión con sus acompañantes, ya una vez fuera, se abalanzó contra las puertas y golpeó repetidamente los cristales con una silla de la terraza de un local próximo, pues el equipo sanitario las había cerrado, impidiéndole la entrada, y había avisado a la Policía que, tras una breve persecución, consiguió detenerlo. CSIF lamenta la actitud pasiva por parte de la gerencia, que se limitó a trasladar “ánimo” al personal y destinó un celador extra como refuerzo, una respuesta que el sindicato califica de “insuficiente”.
“Condenamos enérgicamente esta agresión y exigimos que la Consellería se ponga las pilas y actúe con firmeza para garantizar la integridad física y emocional de los profesionales, pues no estamos ante un hecho aislado”.
CSIF advierte de un “alarmante incremento” de episodios violentos en los últimos meses en Galicia y recuerda que, en el conjunto del Estado, 2024 cerró con 16 558 agresiones a sanitarios, la cifra más alta desde que existen registros oficiales del Ministerio de Sanidad.
CSIF insta a la Consellería de Sanidade a adoptar, entre otras medidas:
- Refuerzo estable de vigilantes de seguridad en centros de salud y PAC durante los periodos de mayor afluencia y riesgo.
- Aplicación rigurosa y revisión inmediata de los protocolos contra la violencia, adaptándolos a las nuevas tipologías de agresión.
- Programas formativos obligatorios para todo el personal en técnicas de desescalada y manejo de situaciones de tensión.
- Campañas de sensibilización pública que visibilicen el problema y promuevan el respeto al personal sanitario.
“Las cifras demuestran que no basta con declaraciones de buena voluntad; necesitamos medidas tangibles ya”, insiste CSIF.